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Michelin apoya la nueva normativa europea R117-04 sobre el desgaste de los neumáticos

El nuevo reglamento R117-04 garantiza una mayor seguridad, un mayor respeto del medio ambiente y la preservación del poder adquisitivo de los automovilistas

Michelin apoya la nueva normativa europea R117-04 sobre el desgaste de los neumáticos
Miguel Ángel  Fernández
Miguel Ángel Fernández
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Michelin apoya la nueva normativa europea R117-04 sobre las prestaciones de los neumáticos nuevos para automóviles una vez desgastados. Esta normativa, que entró en vigor el pasado 1 de julio 2024, no sólo garantizará una mayor seguridad en las carreteras, sino que también responderá a los retos de preservación del planeta y del poder adquisitivo de los automovilistas europeos.

Para el Grupo, es esencial informar a los consumidores sobre la importancia de las prestaciones de sus neumáticos usados. Esta transparencia es tanto más esencial cuanto que algunas prestaciones de los neumáticos se deterioran con el tiempo, sobre todo en términos de seguridad. La nueva disposición europea incluye una prueba reglamentaria para mejorar la seguridad vial, al tiempo que anima a los automovilistas a confiar en las prestaciones de los neumáticos hasta alcanzar el mínimo legal de 1,6 mm de profundidad del dibujo.

Una prueba para una mayor seguridad

La prueba de frenado en mojado adoptada por las autoridades europeas mide la distancia necesaria para que un vehículo desacelere de 80 a 20 km/h sobre una superficie estándar con una profundidad de agua de un milímetro. Además de estas características específicas, esta prueba incluye otros parámetros precisos, como el coeficiente de adherencia de la carretera o la temperatura ambiente. Las pruebas en mojado ya están en vigor para definir el umbral de seguridad de los neumáticos nuevos según la normativa, y cuentan con un amplio reconocimiento por parte de la industria del neumático. También responden a las situaciones más extremas que un automovilista puede encontrarse en la carretera.

Ofrecer neumáticos que mantengan un alto nivel de prestaciones desde el primer hasta el último kilómetro forma parte del ADN de Michelin y es fruto de la estrategia de desarrollo del Grupo, con un objetivo: la seguridad del usuario. Por ejemplo, al frenar sobre una superficie mojada, un neumático Michelin desgastado y diseñado para mantener sus prestaciones a lo largo del tiempo puede necesitar de media 3,4 metros menos que un neumático nuevo de la competencia. Esta distancia representa aproximadamente la longitud de un coche, unos metros que son cruciales en una situación de emergencia.

Michelin es mundialmente reconocida por su inversión en investigación y desarrollo. Cada año, el Grupo invierte cerca de 1.200 millones de euros en innovación e I+D. Estos importantes esfuerzos permiten a 6.000 investigadores de Michelin crear, por ejemplo, nuevas arquitecturas de neumáticos, dibujos innovadores de la banda de rodadura o desarrollar materiales compuestos con propiedades hasta ahora inéditas. Las elecciones de diseño realizadas por Michelin garantizan una seguridad óptima, sobre todo al frenar sobre mojado, tanto si el neumático es nuevo como si está desgastado.

Una normativa que también protegen el planeta y el poder adquisitivo de los automovilistas

Según un estudio de Michelin, el 50% de los neumáticos se desmontan antes de haber alcanzado una profundidad residual de 3 mm del dibujo de la banda de rodadura.

La aplicación de esta normativa podría repercutir en la demanda de neumáticos nuevos en Europa, que podría reducirse en 128 millones de unidades anuales, lo que supondría una reducción de las emisiones de CO2 de unos 6,6 millones de toneladas. En todo el mundo, cada año se desmontan prematuramente 400 millones de neumáticos, por lo que podrían ahorrarse 35 millones de toneladas de CO2, lo que equivaldría a las emisiones de una ciudad como Nueva York durante seis meses.

Mantener los neumáticos durante más tiempo también contribuirá a preservar el poder adquisitivo de los consumidores. Los automovilistas europeos podrían ahorrar casi 7.000 millones de euros cada año.