En el autobús siniestrado viajaban 40 personas y se dirigían a Roquetas de Mar, habiéndose producido el accidente en Cabeza de Torres, en Murcia
Diez años de cárcel por intento de homicidio a su expareja con un adoquín
La sentencia de conformidad incluye una orden de alejamiento de mil metros por veinte años y una indemnización para la víctima de 180.000 euros
La Audiencia Provincial de Murcia ha condenado este miércoles a diez años de prisión y otros tantos de libertad vigilada a un hombre que ha reconocido en el juicio que intentó asesinar a su expareja cuando dormía asestándole varios golpes con un adoquín en la cabeza y otras partes del cuerpo, con lo que le causó lesiones que tardaron en curar más de quinientos días.
La sentencia de conformidad incluye una orden de alejamiento de mil metros por veinte años y una indemnización para la víctima de 180.000 euros por las secuelas físicas y psíquicas que padece como consecuencia de la agresión, producida el 25 de septiembre de 2017 en la vivienda de ella, en el municipio murciano de Lorca.
El procesado, Ángel R.P., ha pedido cumplir la condena en la cárcel de Córdoba, y el tribunal le ha dado un plazo máximo de siete días para ingresar en la misma.
Con el reconocimiento de los hechos, el acusado ha admitido que accedió al interior de la vivienda de la víctima a primeras horas de aquel día, en el momento en que esta dormía en una habitación junto con su hijo, de corta edad.
Una vez allí le propinó numerosos golpes con el adoquín, sobre todo, en la cabeza, marchándose de la vivienda cuando su expareja cayó al suelo inconsciente y trasladándose acto seguido hasta la localidad almeriense de Pulpí, donde trabajaba.
El procesado ha reconocido también que antes de abandonar el piso se cambió de ropa, escondiendo la que llevaba manchada de sangre en la finca donde desarrollaba su actividad laboral. EFE
Escribió que "estadísticamente es mucho más probable que un sacerdote cometa un delito de agresión sexual contra menores de edad que delinca una persona migrante"
Localizados por la alerta automática enviada desde el móvil de uno de los ocupantes, todos de Madrid, tras el impacto
No precisaban ayuda médica, pero sí para poder avanzar, ya que la nieve les impedía continuar