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Clásico

De mal gusto

Por Miguel Ángel Fernández.

¿Cuánto más sabemos de moda peor vestimos?


¿Alguien puede explicar por qué motivo la gente que pertenece al mundo de la moda viste tan horrible? Esas personas que trabajan para que nosotros disfrutemos de las tendencias, las pasarelas y las nuevas colecciones en las tiendas, en muchas ocasiones, parecen vagabundos que eligen su ropa a oscuras.

Podemos analizarlo como si se tratase de un estudio en profundidad. Lo llamaremos el 'gráfico de la moda'. En un principio, cuando la gente comienza a interesarse por este mundo suele vestirse de forma muy básica y sin arriesgar. Todavía no tienen herramientas y ven la moda desde lejos.

Poco a poco, a raíz que logran  acumular conocimientos y a introducirse más en esta industria, comienzan a experimentar con su estilo y se atreven con nuevas siluetas, colores arriesgados y estilismos muy personales. Pero, todavía sin incumplir ciertas normas, como la de no mezclar nunca plata con oro, o la de no combinar unos estampados con otros.

En ese punto, tu entorno puede considerarte como una persona que sabe de moda. Es el momento en el que alcanzas un buen estilo. Sería el punto más álgido de nuestro gráfico. Has ido ascendiendo en línea creciente hacia un buen estilo.

Hay muchas de esas personas interesadas en moda que se queda ahí. Alcanzan ese nivel y no continúan evolucionando. Pero, si te atreves un poco más, llegarás a la parte divertida del hipotético estudio que estamos haciendo.

Vas más allá. Compras ropa vintage, conoces diseñadores pequeños que tienen una estética muy particular y comienzas a coleccionar piezas únicas que a cualquiera le parecerían horribles pero que tú, desde tu posición de experto, valoras como algo magnifico.

Te compras en un mercadillo esa falda que te maravilla porque te recuerda a ese modelo único que tiene X marca o te haces con esos zapatos que te apasionan que te recuerdan a esa colección de la década de los noventa de X diseñador.

En ese mismo momento, tu madre te dice que tu outfit es muy raro y la gente se queda mirándote por la calle pensando en lo raro que eres.

Y en ese punto, aunque la gente piense que vistes horrible, tú sabes que tu estilismo está súper pensado. Cada silueta perfectamente encajada, cada pieza vintage que tanto te costó conseguir, cada referencia súper elaborada.

Has salido de tu zona de confort y eso te hace ser una persona tan cool. Y llega el punto en el que te ves tan diferente que sabes que vas a salir a la calle y nadie va a llevar lo mismo que tú. Y si lo hace, será de una forma muy distinta.

Has llegado a ese momento en el que has pasado de llevar un outfit feo por no tener ni idea de moda, a llevar un outfit muy feo, sabiéndolo. Y habiendo trabajado cada pequeño detalle de ese conjunto. Feo, muy feo pero con intención de que lo sea.

Es por eso que cuando vemos a alguien vistiendo muy mal por la calle, debemos valorar si simplemente no tiene ni idea de moda, o es que, quizá, es un experto y está jugando con toda su experiencia y sus conocimientos.